Berlín es una de las ciudades con más historia del mundo. Fue un punto clave durante la Segunda Guerra Mundial y, tras su fin, quedó dividida en cuatro zonas controladas por los Aliados. Sin embargo, las tensiones no tardaron en aparecer, sobre todo entre las dos grandes potencias occidentales (Inglaterra, Francia y EE. UU.) y la Unión Soviética. Este conflicto culminó en la construcción del Muro de Berlín, que dividió la ciudad en dos partes. Aunque puede que Berlín no sea la ciudad más bonita del mundo, es un destino que todos deberían visitar al menos una vez en la vida para conocer de primera mano su rica historia y sus increíbles monumentos.
Si quieres visitar y conocer la ciudad a fondo, te recomendamos hacer un free tour por la ciudad. Además te recomendamos hacer una guía sobre el nazismo en Berlín donde aprenderás mucho sobre esta cruel etapa de la historia en su epicentro.
Una de las cosas más icónicas de Berlín es la puerta de Brandenburgo. Se encuentra en el centro de la ciudad y antiguamente era la puerta de entrada a Berlín, construida en al año 1791.
Hay una historia curiosa con la Cuadriga (un tipo de carro tirado por caballos) de lo alto de la Puerta de Brandenburgo, ya que después de la Batalla de Jena, Napoleón en signo de victoria, sacó la cuadriga y se la llevó a París como trofeo de guerra. Ocho años más tarde de este suceso, gracias a tropas alemanas y al gobernador de Berlín se la pudo llevar de vuelta.
El Monumento al Holocausto de Berlín esta compuesto por 2,711 bloques de hormigón de diferentes tamaños, es un homenaje a las víctimas de la época más oscura de la humanidad. Pasear entre los bloques genera una sensación única, que invita a la reflexión.
Potsdamer Platz es una moderna plaza llena de rascacielos y edificios contemporáneos. Aunque ahora es un símbolo de la modernidad, fue un importante centro cultural y comercial desde el siglo XIX. Durante la Segunda Guerra Mundial, la plaza quedó completamente destruida, y solo un edificio sobrevivió a los bombardeos.
Lustgarten es un parque situado en la Isla de los Museos. Este animado espacio público es perfecto para relajarse y disfrutar de sus alrededores, como la majestuosa Catedral de Berlín y el Altes Museum, dos puntos importantes de la ciudad.
Situada en el Lustgarten, la Catedral de Berlín destaca por su estilo barroco. Construida entre 1895 y 1905, sufrió graves daños durante la Segunda Guerra Mundial cuando una bomba cayó sobre su cúpula. A pesar de ello, hoy en día sigue siendo uno de los edificios más impresionantes de la ciudad.
El Altes Museum es uno de los museos más importantes de Berlín, con una colección que incluye reliquias romanas, griegas y etruscas. Es un museo clásico y cuenta con reliquias romanas, griegas y etruscas. El precio de la entrada para adultos es de 10€, y para estudiantes 5€.
El Museo abre todos los días menos el lunes. El resto de días abren desde las 10:00 hasta 18:00h , a excepción del jueves que cierra a las 20:00h.
Es una plaza central de Berlín y lleva siéndolo incluso desde la Edad Media, donde ya era un importante punto al haber un mercado allí. Se pasó a llamar Alexanderplatz en honor al Zar Alejandro I de Rusia, después de una visita que realizó a esa zona.
En la actualidad es de las plazas más concurridas de la ciudad, ya sea por turistas o por ciudadanos de Berlín, es un punto de reunión, además se encuentra una importante estación que lleva el mismo nombre. En Alexanderplatz encontrarás el Reloj Mundial y la Torre de Televisión.
Pero sin duda lo más curioso para ver en Alexanderplatz es el famoso Reloj Mundial que hay en la plaza, que como su nombre indica, señala las horas en varios husos horarias de todo el mundo.
Por último, en Alexanderplatz, también se encuentra la Torre de Televisión, una gran torre de radiodifusión que cuenta con 368 metros de altura. Existe la posibilidad de subir a ella, ya que a 203 metros de altura se encuentra un bar (bar 203), un restaurante (restaurant Sphere) y un observador.
Para subir al observador, desde donde puedes acceder al bar también, debes pagar 17,50€ por adulto, 14,00€ para estudiantes , y para niños de 4 hasta 14 años cuesta 9,50€. Para niños menores de 4 años, subir es gratuito.
Si lo que quieres es ir al restaurante deberás reservar previamente por su página web, los precios son caros y varían dependiendo a qué hora quieres ir.
Os dejamos el link a la página oficial de la Torre de Televisión por si queréis reservar para subir a la torre o para reservar al restaurante. Tener en cuenta que para comprar los tickets de estudiantes tiene que ser en taquilla, no se pueden comprar online.
El East Side Gallery es el mayor tramo que se conserva del muro de Berlín y actualmente convertido en una galería de arte Urbano, en forma de memoria. A lo largo de los 1.3 kilómetros que tiene, está llena de arte urbano, graffitis y pinturas, convirtiéndose así en la mayor galería de arte al aire libre de todo el mundo y rememorando también acontecimientos ocurridos en aquella época.
Como puntos destacados, el más icónico es el mural de El Beso, una pintura realizada por un artista ruso llamado Dimitri Vrubel, que reproduce el famoso beso entre los dos líderes socialistas en el 1979, Leonid Brezhnev (lider de la Unión Soviética) y Erich Honecker (dictador de la República Occidental de Alemania). El mural lo pintó 1 mes después de la caída del muro, y lo hizo en forma de sátira de aquel momento y hoy es todo un símbolo de Berlín.
Otro mural muy destacado es el del Trabant. En él se representa este modelo de coche, el Trabant chocando y traspasando el muro, y se dice que muchos de estos coches clásicos, cuando se comenzó a derribar el muro, empezaron a pasar con él los pasos fronterizos. Desde entonces pasó a ser un vehículo que no costaba nada a ser todo un símbolo e incluso hoy venderse reliquias de este vehículo por miles de euros.
Gendarmenmarkt es una elegante plaza en Berlín que alberga dos catedrales casi idénticas: la Alemana y la Francesa. Es uno de los rincones más encantadores de la ciudad.
La Catedral Alemana, conocida también como la Iglesia Nueva, se encuentra en Gendarmenmarkt y puede visitarse gratuitamente.
Puedes visitarla de martes a domingo desde las 10:00 hasta las 18:00h y entre mayo y septiembre cierran 1 hora más tardes, hasta las 19:00h. Los lunes permanece cerrado excepto que sea festivo.
Al lado contrario de la Catedral Alemana se encuentra la Francesa, construida en 1705 y era una importante Iglesia de la comunidad francesa que habitaba en Berlín. En la cúpula de la Catedral hay un mirador abierto para los visitantes desde donde se pueden ver vistas panorámicas de Berlín, y tienen un curioso restaurante en el piso inferior de la Catedral. Pasar a la catedral es gratuito y permanece abierta todos los días desde las 10:00 hasta las 18:00h.
Es de las iglesias que más nos han llamado la atención, y es que después de ser destruida en casi su totalidad en la Segunda Guerra Mundial, han decidido conservar lo que quedó y dejarla tal como estaba, con alguna pequeña reforma para mantenerla en pie, pero se pueden ver perfectamente los destrozos de la guerra, incluso hay boquetes en los que se aprecia que dieron algunos proyectiles. Sin duda, aunque se encuentre algo alejada de los demás sitios turísticos de la ciudad, no te puedes ir de Berlín sin verla, vale mucho la pena.
Este edificio alberga el actual Parlamento de Alemania y es un punto importante dentro de la capital Alemana.
Desde que Berlín se dividiese en 4 después de finalizar la Segunda Guerra Mundial se instalaron algunos pocos puntos fronterizos para pasar de la zona está (dominada por los soviéticos) a la oeste (la formaban las potencias: Francia, Inglaterra y Estados Unidos), los cuales solo podían ser utilizados por políticos, militares y en ocasiones excepcionales. Mucha gente intentó huir de un lado a otro por estos puntos, algunos lo consiguieron, y muchos perdieron la vida.
Uno de los más importantes fue el Checkpoint Charlie, este punto de acceso era entre la zona Estadounidense de Berlín, con la zona oriental (controlada por los soviéticos). Es tan famoso por 2 claras razones, una es que dividía dos zonas bastante importantes de Berlín y la otra es que hasta 1961, cuando se decidió cerrar las fronteras estuvo a punto de comenzar una guerra atómica que muy fácilmente podría haber derivado en la Tercera Guerra Mundial. Justo en este punto 10 tanques americanos se colocaron enfrentándose a otros 10 tanques soviéticos, debido a las grandes tensiones que se vivían en esos momentos. Permanecieron uno frente al otro durante horas, sin atacar a la espera de órdenes, afortunadamente se disolvieron y se marcharon.
El Checkpoint Charlie original fue destruido, pero en el año 2000 se decidió levantar una réplica de este paso fronterizo, la caseta que hay actualmente es idéntica a la que había anteriormente. También existe un museo llamado Museo Checkpoint Charlie, donde se cuenta más sobre la historia y los conflictos sucedidos en este Checkpoint.
El Tiergarten es el mayor parque de Berlín, tiene una extensión de 210 hectáreas y es el pulmón de la ciudad. Desde la Puerta de Brandeburgo hay una entrada a este gran parque, perfecto para dar una vuelta y sentirte en plena naturaleza, aunque estés en el centro de la ciudad. Tiergarten significa zoológico. Se llamaba así debido a que estaba lleno de animales y la nobleza lo usaba como coto de caza.
En el centro del parque de Tiergarten se encuentra este alto monumento que conmemora 3 batallas ganadas por los alemanes. En un principio se empezó a construir en honor a la victoria conseguida en la guerra germano-danesa (1864), de la que salió vencedora Prusia. Pero mientras estaba en construcción Alemania cosechó dos victorias más, en la Guerra Alemana (1866) contra Austria y en la Guerra contra Francia (1871).
En este barrio se puede encontrar una gran cultura judía, y fue el mayor asentamiento judío en Berlín antes de la Segunda Guerra Mundial. Aquí se construyó la primera Sinagoga de Berlín, motivo por el que se extendió este barrio y vivían un montón de judíos. Lamentablemente quedó gravemente dañada en la Segunda Guerra Mundial, siendo bombardeada, por lo que después de una gran reforma en 1995 pudo reabrir sus puertas.
Este gran palacio que se encuentra a las afueras de Berlín, es un precioso palacio que se construyó por órdenes de Sofía Carlota de Hannover, esposa de Federico III que más tarde se convirtió en el primer rey de Prusia y llamado Federico I de Prusia. Después de la muerte de Sofía Carlota, Federico quiso homenajear a su mujer cambiando en nombre al palacio a Charlottenburg, anteriormente denominado Lietzenburgo. El palacio, desde 1990, es Patrimonio Mundial de la UNESCO.
Lo que más llama del palacio sin duda, son sus grandes y hermosos jardines. Para entrar al palacio hay que pagar, pero entrar a los jardines es totalmente gratuito, desde los que podrás también ver por fuera el palacio, así que aunque no te quieras pasar al palacio vale la pena tan solo visitarlo por fuera.
El horario de Palacio varía según el mes de tu visita. Desde abril hasta octubre abre desde las 10:00 hasta las 18:00h. Desde noviembre hasta marzo abre desde las 10:00 a 17:00h. El Palacio abre todos los días menos el lunes.
Tienen distintas tarifas dependiendo de que quieres visitar, pero si tu intención es entrar la mejor opción es comprar el ticket que te autoriza a pasar a todas las zonas ya que sale más económico. Para adultos cuesta 17€ y para estudiantes 13€.
Y hasta aquí nuestro post de las 20 cosas que ver en Berlín. Es una ciudad muy interesante y con mucha historia, que estamos seguros que te encantará. Si quieres preguntarnos lo que sea no dudes en contactarnos a través de nuestras redes sociales o por la sección de contacto.