Rotterdam no suele ser una ciudad muy visitada de Holanda ni tan turística como otras ciudades del país, pero la verdad es que es una ciudad agradable que tiene algo que ofrecer. A nosotros nos gustó mucho, desde las preciosas y únicas Casas Cúbicas hasta el Erasmusbrug y su mercado central.
Así que te invitamos a visitar esta ciudad y aquí te dejamos una recopilación de las 15 mejores cosas que ver y hacer en Rotterdam.
Para conocer la ciudad a fondo, te recomendamos hacer un free tour y una visita guiada por su arquitectura, ¡vale mucho la pena!
Será lo primero que veas al llegar a Rotterdam, ya sea en tren o autobús. La Estación Central es muy moderna y bonita. En su interior, encontrarás algunos sitios para comer, una tienda de souvenirs y baños (de pago).
En la calle Oude Binnenweg encontrarás la escultura de Santa Claus, creada por el artista estadounidense Paul McCarthy en 2001. Como dato curioso, hay una estatua igual en Oslo.
Es la calle principal de Rotterdam, se encuentra en pleno centro y es la calle comercial de la ciudad. Aquí encontrarás muchas tiendas, restaurantes y comida rápida. Lo único que echamos de menos fue alguna tienda de souvenirs.
El mercado central de Rotterdam es una parada obligatoria, ya que su estructura en forma de herradura es impresionante. Alberga 228 apartamentos residenciales y un mercado con puestos de gastronomía holandesa y degustaciones.
El mercado abre todos los días. De lunes a jueves y sábados abre desde las 10:00 hasta las 20:00h. Los viernes abre desde las 10:00 hasta las 21:00h. Y los domingos abre desde las 12:00 hasta las 18:00h.
El Stadhuis de Rotterdam, o en español Ayuntamiento, también se encuentra por la zona central de la ciudad y fue construido entre los años 1914 y 1920. Fue uno de los pocos edificios que quedó en pie tras los bombardeos que sufrió la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial, exactamente se produjeron el 14 de mayo de 1940. Vale la pena ver por fuera el edificio ya que es muy bonito. También se pueden realizar visitas guiadas y gratuitas al ayuntamiento pero son para un grupo de mínimo de 5 personas y máximo de 15. Si reunís esta condición deberéis solicitar la visita por correo en la siguiente página.
Sin duda para nosotros el máximo atractivo de Rotterdam son las hermosas y peculiares Casas Cúbicas. Es algo súper diferente y curioso, ya que como el nombre indica son casas cúbicas y que están inclinadas 45 grados en las que de verdad vive gente, son residenciales y se supone que con esta estructura se puede aprovechar mucho más el espacio de la casa.
Podrás comprobar cómo es estar dentro de una casas ya que existe un museo llamado Kijk-Kubus que te recomendamos mucho, que te enseña como es la vida normal dentro de estos peculiares edificios, es una visita rápida que no te quitará mucho tiempo pero es muy interesante. Tan solo cuesta 3€ por persona, para estudiantes y mayores de 65 años cuesta 2€ y niños menores de 12 años pagan 1,50€. Abren todos los días desde las 10:00 hasta las 18:00h.
Y ya si lo que quieres es vivir la experiencia de las casas cubos al máximo, existe un hotel llamado Stayokay Rotterdam. Los precios son algo más elevados que otros hoteles de buena calidad en Rotterdam, ya que rondan los 80€ y los 125€. Eso sí, son habitaciones para 4 personas, por lo que si vais 4 os sale incluso hasta más económico.
Justo detrás de las Casas Cúbicas se encuentra el antiguo puerto de Rotterdam, que es bastante pequeño pero aún se utiliza a pequeña escala. También encontrarás algún barco antiguo a modo de exposición.
Siguiendo la ruta, desde el Antiguo Puerto, si vas dirección al Erasmusbrug pasearas por el Muelle de Rotterdam, que es precioso, ya que tendrás las mejores vistas del puente Erasmusbrug y de los modernos edificios que se encuentran al otro lado. También antes de llegar al puente, a lo largo de más de medio kilómetro, encontrarás colocadas las banderas de todos los países del mundo. Pasear por allí es algo muy agradable.
Al finalizar el recorrido de las banderas y antes del Erasmusbrug os encontraréis con una gran estructura de 46 metros de altura de aluminio, un monumento dedicado a las más de 3.500 personas que perdieron su vida en barcos mercantes durante la Segunda Guerra Mundial.
Este gran puente atirantado de 800 metros de largo es toda una maravilla de la ingeniería y es todo un icono de la ciudad, también lo más llamativo y lo más bonito del puente es su torre asimétrica o pilón, desde donde van los cables del puente. El nombre es dedicado al gran filósofo nacido en Rotterdam, Erasmo de Rotterdam. Si os lo preguntáis, las becas ERASMUS no llevan este nombre por Erasmo, o no directamente, Erasmus es un acrónimo de otras palabras en inglés, pero que una vez pensadas se intentaron ajustar para que el acrónimo coincidiese con el nombre del filósofo, que en latín es Erasmus.
Este edificio se encuentra al otro lado del puente Erasmusbrug, para ser más concretos en el barrio de Kop van Zuid, un barrio bastante moderno en el que destaca el De Rotterdam, un rascacielos de casi 150 metros de altura, que lo más peculiar es su diseño, ya que a 90 metros de altura los edificios son desplazados en otra dirección. Fue elegido el mejor rascacielos de Europa del año 2014 por el CTBUH.
Una muy buena excursión que hacer desde Rotterdam es visitar los Molinos de Kinderdijk, una amplia zona con 19 molinos del Siglo XIII y declarado desde 1994 como Patrimonio Mundial de la UNESCO. Es un sitio muy especial y que debes visitar si tienes tiempo. También hay un molino reformado en museo al que puedes entrar.
Para llegar la mejor forma es desde la estación de Rotterdam Stadhuis coger el tranvía número 23 e ir hasta P+R Beverwaard y desde Beverwaard coger el autobús 489 y bajarte en Kinderdijk De Klok. El trayecto dura aproximadamente 1 hora, y el precio total entre el tranvía y el autobús es de 6€.
Es el parque principal de Rotterdam y ocupa unas 28 hectáreas aproximadamente. Destacan sus preciosos jardines y zonas verdes. Al final del parque encontraréis el Euromast.
El Euromast es una torre de telecomunicaciones de 185 metros con un observatorio de 360 grados y un restaurante. Además, en la parte superior tiene dos suites lujosas cuyo precio ronda los 400€ por noche.
Es una iglesia protestante de Siglo XVI que quedó dañada por los bombardeos que sufrió Rotterdam. Discutieron mucho si debían derribarla ya que la estructura estaba gravemente dañada, o reformarla, y con el paso del tiempo se fue convirtiendo en un símbolo de resistencia en la ciudad. Finalmente se reconstruyó.
El precio para entrar es de 3€ y los niños menores de 12 años entran gratis. Puedes visitarla de martes a sábado desde las 11:00 hasta las 17:00h.
Y este ha sido nuestro post de 15 cosas que ver en Rotterdam. Esperamos que te sea de utilidad. Si tienes cualquier duda, contáctanos por nuestras redes sociales o a través de la sección de contacto.